viernes, 30 de octubre de 2009

Paracaídas.

Charles Plumb, era piloto de un bombardero en la guerra de Vietnam.
Después de muchas misiones de combate, su avión fue derribado por un misil.

Plumb se lanzó en paracaídas, fue capturado y pasó seis años en una prisión norvietnamita. A su regreso a Estados Unidos, daba conferencias relatando su odisea, y lo que aprendió en la prisión.

Un día estaba en un restaurante y un hombre lo saludó:
Le dijo "Hola, usted es el capitán Charles Plumb, estaba en el portaaviones Kitty Hawk, era piloto en Vietnam y lo derribaron verdad?"
"Y usted, ¿cómo sabe eso?", le preguntó Plumb.
"Porque yo empacaba su paracaídas. Parece que le funcionó bien, ¿verdad?"
Plumb casi se ahogó de sorpresa y con mucha gratitud le respondió.
"Claro que funcionó, si no hubiera funcionado, hoy yo no estaría aquí."

Estando solo Plumb no pudo dormir esa noche, meditando:
¿“Se preguntaba cuántas veces vi en el portaviones a ese hombre y nunca le dije buenos días, yo era un arrogante piloto y él era un humilde marinero?"
Pensó también en las horas que ese marinero paso en las entrañas del barco enrollando los hilos de seda de cada paracaídas, teniendo en sus manos la vida de alguien que no conocía.

Ahora, Plumb comienza sus conferencias preguntándole a su audiencia:
¿"Quién empacó hoy tu paracaídas?".
Todos tenemos a alguien cuyo trabajo es importante para que nosotros podamos salir adelante. Uno necesita muchos paracaídas en el día: uno físico, uno emocional, uno mental y hasta uno espiritual.
A veces, en los desafíos que la vida nos lanza a diario, perdemos de vista lo que es verdaderamente importante y las personas que nos salvan en el momento oportuno sin que se los pidamos.

Dejamos de saludar, de dar las gracias, de felicitar a alguien, o aunque sea, decir algo amable sólo porque sí.
Hoy, esta semana, este año, cada día, trata de darte cuenta quién empaca tu paracaídas, y agradécelo.
Las personas a tu alrededor notarán ese gesto, y te lo devolverán empacando tu paracaídas con ese mismo afecto.
Todos necesitamos de todos, por eso demuéstrales tu agradecimiento.
A veces las cosas más importantes de la vida solo requieren de acciones sencillas.
Solo una llamada, una sonrisa, un gracias, un Te Quiero, un Te Amo.

miércoles, 28 de octubre de 2009

Sé feliz.

Puedes tener defectos, vivir ansioso y estar irritado algunas veces, pero no te olvides de que tu vida es la mayor empresa del mundo... Solo tú puedes evitar que ella vaya en decadencia.

Hay muchas personas que te precisan, admiran y te quieren. Me gustaría que siempre recordaras que ser feliz no es tener un cielo sin tempestades, caminos sin accidentes, trabajos sin cansancio, relaciones sin decepciones...

Ser feliz es encontrar fuerza en el perdón...
Esperanza en las batallas...
Seguridad en el palco del miedo...
Amor en los desencuentros.

Ser feliz no es solo valorizar la sonrisa, sino también reflexionar sobre la tristeza.
No es apenas conmemorar el suceso, sino aprender lecciones en los fracasos.
No es apenas tener alegría con los aplausos, sino encontrar alegría en el anonimato.

Ser feliz es reconocer que vale la pena vivir la vida, a pesar de todos los desafíos, incomprensiones y períodos de crisis. Ser feliz no es una fatalidad del destino, sino una conquista de quien sabe viajar para dentro de su propio ser.
Ser feliz es dejar de ser víctima de los problemas y volverse un actor de la propia historia.

Es atravesar desiertos fuera de sí, mas ser capaz de encontrar un oasis en lo recóndito de nuestra alma.
Es agradecer a DIOS cada mañana por el milagro de la vida.
Ser feliz es no tener miedo de los propios sentimientos.
Es saber hablar de si mismo.
Es tener coraje para oír un “NO".
Es tener seguridad para recibir una crítica, aunque sea injusta.

Es besar a los hijos, mimar a los padres y tener momentos poéticos con los amigos, aunque ellos nos hieran.
Ser feliz es dejar vivir a la criatura libre, alegre y simple que vive dentro de cada uno de nosotros.

Es tener madurez para decir “ME EQUIVOQUÉ"
Es tener la osadía para decir “PERDÓNAME".
Es tener sensibilidad para expresar “TE NECESITO".
Es tener capacidad de decir "TE AMO".

Deseo que tu vida se vuelva un jardín de oportunidades para ser feliz...

Que en tus primaveras seas amante de la alegría.
Que en tus inviernos seas amigo de la sabiduría.
Y, cuando te equivoques en el camino, comiences todo de nuevo. Pues así serás cada vez más apasionado por la vida.
Y descubrirás que... Ser feliz no es tener una vida perfecta. Si no usar las lágrimas para regar la tolerancia.

Usar las pérdidas para refinar la paciencia.
Usar las fallas para esculpir la serenidad.
Usar el dolor para lapidar el placer.
Usar los obstáculos para abrir las ventanas de la inteligencia.

Jamás desistas.
Jamás desistas de las personas que amas.
Jamás desistas de ser feliz, pues la vida es un espectáculo imperdible y ERES UN SER HUMANO ESPECIAL!


Autor desconocido.

lunes, 26 de octubre de 2009

Envejecer.

El primer día de clase en la Universidad, nuestro profesor se presentó a los alumnos y nos desafió a que nos presentásemos a alguien que no conociésemos todavía.
Me quedé de pié para mirar alrededor cuando una mano suave tocó mi hombro. Miré para atrás y vi una pequeña señora, viejita y arrugada, sonriéndome radiante, con una sonrisa que iluminaba todo su ser.

Dijo: “Eh, muchacho… Mi nombre es Rosa. Tengo ochenta y siete años de edad ¿Puedo darte un abrazo?”...
Me reí y respondí: “¡Claro que puede!”
Y ella me dio un gigantesco apretón.
“¿Por qué está Ud. en la Facultad en tan tierna e inocente edad?”, pregunté.

Respondió juguetona: “Estoy aquí para encontrar un marido rico, casarme, tener un montón de hijos y entonces jubilarme y viajar”.

“Está bromeando”, le dije. Yo estaba curioso por saber qué la había motivado a entrar en este desafío con su edad; y ella dijo:
“Siempre soñé con tener estudios universitarios, y ahora estoy teniendo uno!”.

Después de clase caminamos hasta el edificio de la Unión de Estudiantes, y compartimos una malteada de chocolate. Nos hicimos amigos instantáneamente. Todos los días en los siguientes tres meses teníamos clase juntos y hablábamos sin parar. Yo quedaba siempre extasiado oyendo a aquella “máquina del tiempo” compartir su experiencia y sabiduría conmigo.

En el curso de un año, Rosa se volvió un icono en el campus universitario y hacía amigos fácilmente dondequiera que iba.
Adoraba vestirse bien, y se reflejaba en la atención que le daban los otros estudiantes. Estaba disfrutando la vida…

Al fin del semestre invitamos a Rosa a hablar en nuestro banquete del equipo de fútbol. Fue presentada y se aproximó al podium.

Cuando comenzó a leer su charla preparada, dejó caer tres de las cinco hojas al suelo. Frustrada, tomó el micrófono y dijo simplemente:

“Discúlpenme, ¡estoy tan nerviosa! ... Nunca conseguiré colocar mis papeles en orden de nuevo, así que déjenme hablar a Uds. sobre aquello que sé”.

Mientras reíamos, ella despejó su garganta y comenzó:
“No dejamos de jugar porque envejecemos; envejecemos porque dejamos de jugar”. “Existen solamente tres secretos para que continuemos jóvenes, felices y obteniendo éxito:

Se necesita reír y encontrar humor en cada día.

Se necesita tener un sueño, pues cuando éstos se pierden, uno muere.. ¡Hay tantas personas caminando por ahí que están muertas y ni siquiera lo sospechan!

Se necesita conocer la diferencia entre envejecer y crecer…”
“Si usted tiene diecinueve años de edad y se queda tirado en la cama por un año entero sin hacer nada productivo, terminará con veinte años…”
“Si yo tengo ochenta y siete años y me quedo en la cama por un año y no hago cosa alguna, quedaré con ochenta y ocho años…”
“Cualquiera consigue quedar más viejo. Eso no exige talento ni habilidad.”

“La idea es crecer a través de la vida y encontrar siempre oportunidad en la novedad.”
“Los viejos generalmente no se arrepienten por aquello que hicieron, sino por aquellas cosas que dejaron de hacer.” “Las únicas personas que tienen miedo de la muerte son aquellas que tienen remordimientos”.

Al fin de ese año, Rosa terminó el último periodo de la facultad que comenzó tantos años atrás.
Una semana después de recibirse, Rosa murió tranquilamente durante el sueño.

Más de dos mil alumnos de la facultad fuimos a su funeral en tributo a la maravillosa mujer que enseñó, a través del ejemplo, que “nunca es demasiado tarde para ser todo aquello que uno puede probablemente ser”.

Estas palabras han sido divulgadas por amor y en memoria de Rosa:

*“ENVEJECER ES OBLIGATORIO, CRECER ES OPCIONAL”*

Si alguna vez no te dan la sonrisa esperada, sé generoso y da la tuya, porque nadie tiene tanta necesidad de una sonrisa como aquel que no sabe sonreír a los demás.

viernes, 23 de octubre de 2009

Reglas sencillas.

La vida sería más fácil… si todos tuviésemos siempre en cuenta estas sencillas reglas:

Si abriste, cierra
Si encendiste, apaga
Si conectaste, desconecta
Si desordenaste, ordena
Si ensuciaste, limpia
Si rompiste, arregla
Si no sabes arreglar, busca al que sepa
Si no sabes qué decir, cállate
Si debes usar algo que no te pertenece, pide permiso
Si te prestaron, devuelve
Si no sabes cómo funciona, no toques
Si es gratis, no lo desperdicies
Si no es asunto tuyo, no te entrometas
Si no sabes hacerlo mejor, no critiques
Si no puedes ayudar, no molestes
Si prometiste, cumple
Si ofendiste, discúlpate
Si no sabes, no opines
Si opinaste, hazte cargo
Si algo te sirve, trátalo con cariño

Si no puedes hacer lo que quieres, trata de querer lo que haces.

miércoles, 21 de octubre de 2009

Te deseo lo suficiente.

Hace poco tiempo cuando estaba en el aeropuerto escuché por casualidad a una madre e hija que se estaban despidiendo. Cuando anunciaron la partida del vuelo ellas se abrazaron y la madre dijo:
- "Te amo y te deseo lo suficiente".
La hija respondió:
- "Madre, nuestra vida juntas ha sido más que suficiente. Tu amor es todo lo que he necesitado.
También te deseo lo suficiente". Ellas se saludaron con un beso y la hija partió.
La madre pasó muy cerca de donde yo estaba sentada y noté que ella necesitaba llorar.

Traté de no observarla para no invadir su privacidad, pero ella se dirigió hacia mí y me preguntó:
- "Alguna vez se ha despedido de alguien sabiendo que era para siempre?".
- Sí, lo he hecho - respondí. Perdón por preguntar - contesté -, pero ¿por qué esta despedida es para siempre?
- Yo soy una mujer vieja y ella vive muy lejos de aquí. La realidad es que su próximo viaje será para mi funeral, dijo.
- Cuando se despidió de ella escuché que le dijo "te deseo lo suficiente". ¿A qué se refiere?
Comenzó a sonreír. Eso es un deseo que hemos transmitido de generación en generación. Mis padres solían decirlo. Ella hizo una pausa y miró hacia arriba como si tratara de recordarlo en detalle, luego sonrió aún más.
- Cuando decimos "Te deseo lo suficiente", deseamos que la otra persona tenga una vida llena de sólo lo suficientemente bueno para vivir.

Entonces, dirigiéndose hacia mí, ella compartió lo siguiente como si lo estuviera recitando de memoria:
"Te deseo que tengas suficiente sol para mantener tu espíritu brillante."
"Te deseo suficiente lluvia para que aprecies aún más el sol.”
"Te deseo suficiente felicidad para que tu alma esté viva."
"Te deseo suficiente dolor para que las pequeñas alegrías de la vida parezcan más grandes."
"Te deseo que tengas suficientes ganancias que satisfagan tus necesidades."
"Te deseo suficientes pérdidas para que aprecies todo lo que posees."
"Te deseo suficientes bienvenidas para que logres soportar las despedidas".

Luego ella comenzó a llorar y se alejó.

Se dice que toma un minuto encontrar a una persona especial, una hora en apreciarla, un día para amarla, pero una vida para olvidarla.

Toma el tiempo necesario para vivir.

A todos LES DESEO LO SUFICIENTE!!!

lunes, 19 de octubre de 2009

¿Cómo hacerte saber que siempre hay tiempo?

Que uno sólo tiene que buscarlo y dárselo,
Que nadie establece normas salvo la vida,
Que la vida sin ciertas normas pierde forma,
Que la forma no se pierde con abrirnos,
Que abrirnos no es amar indiscriminadamente,
Que no está prohibido amar,
Que también se puede odiar,
Que el odio y el amor son afectos
Que la agresión porque sí hiere mucho,
Que las heridas se cierran,
Que las puertas no deben cerrarse,
Que la mayor puerta es el afecto,
Que los afectos nos definen,
Que definirse no es remar contra la corriente,
Que no cuanto más fuerte se hace el trazo más se dibuja,
Que buscar un equilibrio no implica ser tibio,
Que negar palabras implica abrir distancias,
Que encontrarse es muy hermoso,
Que el sexo forma parte de lo hermoso de la vida,
Que la vida parte del sexo,
Que el “por qué” de los niños tiene un porqué,
Que querer saber de alguien no es sólo curiosidad,
Que querer saber todo de todos es curiosidad malsana,
Que nunca está de más agradecer,
Que la autodeterminación no es hacer las cosas solo,
Que nadie quiere estar solo,
Que para no estar solo hay que dar,
Que para dar debimos recibir antes,
Que para que nos den hay que saber también cómo pedir,
Que saber pedir no es regalarse,
Que regalarse es, en definitiva, no quererse,
Que para que nos quieran debemos demostrar qué somos,
Que para que alguien “sea” hay que ayudarlo,
Que ayudar es poder alentar y apoyar,
Que adular no es ayudar,
Que adular es tan pernicioso como dar vuelta la cara,
Que las cosas cara a cara son honestas,
Que nadie es honesto porque no roba,
Que el que roba no es ladrón por placer,
Que cuando no hay placer en las cosas no se está viviendo,
Que para sentir la vida no hay que olvidarse que existe la muerte,
Que se puede estar muerto en vida,
Que se siente con el cuerpo y la mente,
Que con los oídos se escucha,
Que cuesta ser sensible y no herirse,
Que herirse no es desangrarse,
Que para no ser heridos levantamos muros,
Que quien siembra muros no recoge nada,
Que casi todos somos albañiles de muros,
Que sería mejor construir puentes,
Que sobre ellos se va a la otra orilla y también se vuelve,
Que volver no implica retroceder,
Que retroceder también puede ser avanzar,
Que no por mucho avanzar se amanece más cerca del sol,
¿Cómo hacerte saber que nadie establece normas salvo la vida?

¿Cómo hacerte saber que siempre hay tiempo?

Mario Benedetti

viernes, 16 de octubre de 2009

Vida.

Ya perdoné errores casi imperdonables,
traté de sustituir personas insustituibles
y olvidar personas inolvidables.

Ya hice cosas por impulso,
ya me decepcioné con personas
cuando nunca pensé decepcionarme,
más también decepcioné a alguien.

Ya abracé para proteger,
ya me reí cuando no podía,
ya hice amigos eternos,
ya amé y fui amado,
pero también fui rechazado,
ya fui amado y no supe amar.

Ya grité y salté de tanta felicidad,
ya viví de amor e hice juramentos eternos,
pero también "rompí la cara" muchas veces!

Ya lloré escuchando música y viendo fotos,
ya llamé sólo para escuchar una voz,
ya me enamoré por una sonrisa,
ya pensé que iba a morir de tanta nostalgia y...
...tuve miedo de perder a alguien especial
(y terminé perdiéndolo) Pero sobreviví!!
Y todavía vivo!

No paso por la vida...
y vos tampoco deberías pasar... Viví!!!
Bueno es ir a la lucha con determinación,
abrazar la vida y vivir con pasión,
perder con clase y vencer con osadía,
porque el mundo pertenece a quien se atreve.

Y...
LA VIDA ES MUCHO
para ser insignificante!

Charles Chaplin

miércoles, 14 de octubre de 2009

Como vivir un gran amor.

No existen relaciones afectivas perfectas, las relaciones humanas, más la de pareja, son una herramienta muy valiosa y fuerte de evolución; siempre vamos a compartir con personas que nos dan la posibilidad de aprender algo y crecer; de nosotros dependerá elegir entre maestros "cariñosos o violentos".

Lee y entérate como procurarte un gran amor, porque eso de "mala suerte en lo afectivo" es una inmensa mentira, existen muchas herramientas para buscar la felicidad.
Si ya tienes pareja y las cosas van mal, recuerda: "TIENE SENTIDO" que esa persona esté en tu vida, ¿hay algo que debes aprender? Para empezar distingue si es amor, pues nos enseñaron a ponerle ese título a situaciones conflictivas y neuróticas causantes de dolor, frustración y resentimiento.


NADIE SUFRE POR AMOR.
Es absolutamente imposible sufrir por amor, se sufre por carencias y heridas emocionales de la infancia. Muchos creen que están viviendo "el amor de su vida" porque se sacrifican y dejan de lado sus vidas.

El amor es vitamina F = Felicidad; es estímulo, estar bien, entusiastas, progresar, ser creativos, vivir en paz. Decir que se sufre por amor es una contradicción total, no se sufre por ser feliz.

Si estás en una relación y no te dan el amor que quieres, debes comenzar a buscar una solución, pero no en el otro, sino dentro de ti.

TU PAREJA ES TU REFLEJO.
Si tu consorte es una linda y exitosa persona te encantará saber esto, pero si es infiel y fría, no te gusta la idea. Pues es cierto, tu pareja refleja un estado interno tuyo que no manejas a escala consciente. Le echamos la culpa al otro y queremos que cambie, nos aliviamos pensando que tiene más defectos que nosotros y “tapamos” el verdadero problema: un nivel bajo de autoestima, y no te das el amor que requieres tu mismo.

Lo positivo es saber que el poder y la solución están un tus manos: para tener pareja y ser feliz tienes que trabajar contigo mismo, ¡qué suerte que no hay que esforzarse para que el otro cambie!


EL REFLEJO NO ES LITERAL.
No queremos decir que tú haces lo mismo que tu pareja, sino que su inadecuado comportamiento de infidelidad, maltrato, indiferencia, etc. reflejan algo que tu cuerpo emocional cree; inconscientemente pensamos que merecemos lo inaceptable, desviamos la atención en “lo malo” que es el otro y mantenemos la neurosis.

Caemos en estas situaciones repitiendo con sus particularidades los modelos de papá y mamá.

CONDICIONES OBLIGATORIAS PARA QUE HAYA PAREJA.
La primera es la química, tiene que haber algo en el otro que te atraiga, la segunda es la compatibilidad: debe haber como mínimo un 60% de elementos compatibles y tercero, compromiso: ambos han de decidir conscientemente el compartir sus vidas para estar mejor, ¡SI HAY PRESIÓN Y UNO ESTÁ DETRÁS DEL OTRO INSISTIENDO, NO HAY PAREJA!, esa es una señal muy clara.

Recordemos que la relación de pareja es el amor del uno por el otro, no la absorción del uno por el otro.

No lo olvides, quien no está preparado para el compromiso eres tú, y el otro es tu reflejo. La pareja que nos maltrata y humilla nos está haciendo el favor de recordarnos que tenemos un montón de heridas internas, busca como mejorarte, agradécele y déjale partir.


EL EGO NOS HACE CREER QUE AGUANTAMOS POR AMOR. ¡Y NO ES CIERTO! SOPORTAR, LUCHAR, PERMITIR LO INSOPORTABLE, SENTIR PERSECUCIÓN, AGUANTAR MALTRATOS, NO ES AMOR.

Ten cuidado con: Tratar a tu pareja como una criatura, porque entonces el otro se comportará como una criatura. Toda sobreprotección indica esta situación, y lo más seguro es que surja la infidelidad, pues a nadie le gusta hacer el amor con su madre o padre. No uses apodos infantiles: Mami, papi, mi bebe, nene, mi florcita, etc., suenan lindos pero perjudican. Prefiere: Amor, mi cielo, cariño...

Cuando una pareja incompatible permanece unida "por los niños", les hace un gran daño. Ellos viven procesos de separación agónicos, tormentosos. Si realmente amas a tus hijos, enséñales con tu ejemplo a decidir y hacer lo que quieren.

POR QUE ME TOCAN PAREJAS DIFÍCILES?
Porque internamente tenemos una programación que nos conduce a elegir personas difíciles, no estamos preparados para ser felices y gozar del amor.

Además el peor motivo para buscar pareja es por estar solos, si nos desesperamos elegiremos lo peor. Cuando tenemos demasiada hambre comemos cualquier cosa, no elegimos. Si estamos hambrientos emocionalmente hacemos igual, y en cuanto a pareja hay que seleccionar, sin apuro ni presión el "menú principal"

Soluciones:
1. Dejar de ver telenovelas. Son la peor fuente para programar el subconsciente, es drama puro lo que ponen en la mente y por muy analíticos que seamos siempre afectan.
2. Revierte tu programación negativa infantil. Focaliza y elige modelos externos que fortalezcan tu idea de felicidad. Usa la técnica del anclaje, al reconocer un modelo positivo de pareja en la calle, la TV o un libro piensa: ¿Es esto lo que quiero para mí? También es bueno habituarse a poner la atención en las virtudes del otro y no en los defectos, pues en lo que ponemos pensamiento y atención se reproduce (si creo y pienso que mi pareja es infiel, creare las condiciones para eso)
3. Hablar con parejas amigas que sean felices y preguntarles como lo lograron. Ellas tienen una información que tu ignoras, busca conocerla. Nuestro ego nos invita a envidiar, porque maneja un concepto estrecho de escasez, hay que hacer caso al espíritu, quien sabe que hay amor para todos; entonces intentemos, copiemos, creemos y no envidiemos.


EL PLAN PARA ENCONTRAR A TU PAREJA
La mayoría cree que el amor cae del cielo y no se puede planear, nos toca o no nos toca. Eso es falso, si no hemos logrado una vida afectiva placentera podemos entrar en acción, movernos, hacer un plan como si fuéramos de vacaciones.

1. Elabora una lista de compatibilidades. Hay que elegir el tipo de pareja.
Haz una lista de las características en todos los aspectos que te gustaría tuviera tu pareja y cubre cada detalle: descripción física, edad, nivel sociocultural, económico, afinidad espiritual, etc., de manera muy específica.
2. Al encontrar el candidato chequea la compatibilidad: 50% o menos, la proyección es drama. De 60% para arriba se pronostica éxito. Y 80% es un muy buen nivel.
3. ¿Dónde buscarla? Visita los lugares afines al tipo de gente que buscas, donde haya menos competencia y se compartan afinidades. Si lo quieres deportista, acude a gimnasios, y si te desagradan los salidores no vayas a buscar novio en las discotecas. También puedes correr la voz, hazte publicidad, dile a tus amigos que buscas pareja.
4. Trabaja contigo mismo. La principal fuente de frustración al nivel de pareja es querer cambiar al otro, olvídate del otro. Comienza a buscar todo lo que puedas hacer para ayudarte, sanar las heridas de tu niño interior y alimentar bien tu mente subconsciente, pues ella siempre ejecuta lo que lleva dentro.
5. Si tienes pareja y las cosas no van bien, haz lo mismo; pues al mejorar tú, mejora el otro. Ahora, si hay muchas cosas que te molestan del otro, inconscientemente te estás diciendo que es la persona errónea y quieres cambiarla. El trabajo personal te dará dos alternativas:
a. Si la persona con la que estas es quien mereces, comenzara a darte el amor que esperas.
b. Si no es la que te conviene, se correrá y vendrá otra como la que quieres.

Si la incomodidad es muy grande, no duermes, estas sufriendo, perdiste el apetito, estás preocupado, debes cuanto antes salir de allí. Haz caso, después vienen cosas peores, enfermedades graves, grandes conflictos y violencia.

Cuesta, es muy difícil, el cuerpo emocional siente un gran vacío, pero hay que abandonar la relación, parece broma pero pueden caer en el estado que escribe la canción de Shakira: sorda, ciega, loca, muda...y además la parte psicológica no tiene cirugía que la repare una vez se pierde la salud.

Un lema para todos: UNA RELACIÓN DE PAREJA ES SIEMPRE PARA ESTAR MEJOR.

Una buena relación es un contrato entre dos, donde ambos hacen lo que está a su alcance para hacerse mejor la vida. Si no, no hay relación, pues tener pareja no es para competir, cambiar al otro o descargar las neurosis que padecemos.


CÓMO ATRAER UN BUEN AMOR?:
Actúa, haz el plan, ponle fecha, si no se cumple, no te desanimes, se perseverante. Prepárate con tiempo y disponte a darle la bienvenida, recuerda que una relación comienza mucho antes de encontrarse con esa persona, pues comienza contigo.

Decide cuanto quieres pagar, pide una persona que traiga lecciones a tu vida, pero de un modo que puedas digerirlas fácilmente, sin traumas, ni dolor; pide un maestro cariñoso. Invierte tiempo y esfuerzo en desligarte de tu dolor emocional del pasado y fórmate una nueva conciencia, lee libros, busca consejos de profesionales, busca ayuda de personas con experiencia, pero ante todo haz el trabajo interior contigo mismo, reconcíliate con tu pasado y tu presente. Toma modelos externos que alimenten lo que has elegido.

Remueve de tu casa todos los objetos de relaciones anteriores, sobre todo si fueron malas; regala, vende, quema, dona, bota, sácalos de tu vida. Si te cuesta hazlo poco a poco, pero hazlo. Las fotos, las joyas, la ropa, los muebles te recuerdan inconscientemente el pasado. Todos estos objetos están cargados de "heridas del pasado".

Si la relación fue buena y terminó adultamente, puedes conservarlos. La persona que estás esperando ya existe, en lugar de gastar energías sintiéndote solo y triste, lo cual aleja al otro, háblale, dile: " Te doy la bienvenida, estoy preparándome, tengo muchas cosas bellas que ofrecerte" Este mensaje hará eco en el universo y le llegará de algún modo a esa persona que será para ti.

Si te agarra la angustia, cierra los ojos e imagina lo bonito que será estar juntos con tu nueva pareja sin ponerle rostro. Es difícil creer y permanecer en la incertidumbre, pero quien tiene fe recibe; solo los débiles terminan una relación y pasan de una a otra buscando paracaídas que les alivien el dolor del golpe. Si tienes dudas busca como eliminarlas, solo tenemos éxito en aquello de lo que estamos convencidos. Pide ayuda a: psicólogo, psiquiatra, consejero, etc. Y también en el ámbito espiritual.

Renuncia a sufrir, decrétalo, grítalo, escríbelo, comprométete contigo mismo a respetarte y darte amor. Primero renuncia a lo que no quieres, luego elige y afirma lo que deseas para ti. Ámate a ti mismo, no vivas la fantasía de creer que si llega alguien que te ame todo se resolverá.

Si tú generas amor, atraerás amor; el gran secreto de oro para vivir una gran relación es amarse a uno mismo, no te sacrifiques por nadie, pues te desequilibraras, siempre tú en primer plano.

Pide a Dios que te ayude a encontrar el plan que él tiene para tu vida, pues no estamos llamados a vivir desdichados, sino a vivir en Amor y desde el Amor, pues venimos de un Dios que es todo Amor.

OLVIDA Y PERDONA, lo que te toco vivir tenía un sentido aunque no lo comprendas.

HORACIO VALSECIA, psicólogo argentino.

lunes, 12 de octubre de 2009

Principio del vacío.

¿Usted tiene el hábito de juntar objetos inútiles en este momento, creyendo que un día (no sabe cuándo) podrá precisar de ellos?

¿Usted tiene el hábito de juntar dinero sólo para no gastarlo, pues en el futuro podrá hacer falta?

¿Usted tiene el hábito de guardar ropa, zapatos, muebles, utensilios domésticos y otras cosas del hogar que ya no usa hace bastante tiempo?

Y dentro de usted...

¿Usted tiene el hábito de guardar broncas, resentimientos, tristezas y miedos?

No haga eso. ¡Es anti-prosperidad!

Es preciso crear un espacio, un vacío, para que las cosas nuevas lleguen a su vida.

Es preciso eliminar lo que es inútil en usted y en su vida, para que la prosperidad venga.

Es la fuerza de ese vacío que absorberá y atraerá todo lo que usted desea.

Mientras usted está material o emocionalmente cargando cosas viejas e inútiles, no habrá espacio abierto para nuevas oportunidades.

Los bienes precisan circular. Limpie los cajones, el cuarto del fondo, el garaje.

Dé lo que usted no usa más.

La actitud de guardar un montón de cosas inútiles amarra su vida.

No son los objetos guardados que estancan su vida, sino el significado de la actitud de guardar.

Cuando se guarda, se considera la posibilidad de falta, de carencia. Es creer que mañana podrá faltar, y usted no tendrá medios de proveer sus necesidades.

Con esa postura, usted está enviando dos mensajes para su cerebro y para su vida:
1°, usted no confía en el mañana y,
2°, usted cree que lo nuevo y lo mejor no son para usted, ya que se alegra con guardar cosas viejas e inútiles.

Deshágase de lo que perdió el color y el brillo y deje entrar lo nuevo en su casa… y dentro de sí mismo…

Joseph Newton

El autor de las fotos que ilustran esta entrada es el talentosísimo Gregory Colbert.

viernes, 9 de octubre de 2009

El Arte de Callar (parte II)

Principios necesarios para callar

1. Sólo se debe dejar de callar cuando se tiene algo que decir más valioso que el silencio.

2. Hay un tiempo para callar, igual que hay un tiempo para hablar.

3. El tiempo de callar debe ser el primero cronológicamente; y nunca se sabrá hablar bien, si antes no se ha aprendido a callar.

4. No hay menos debilidad o imprudencia en callar cuando uno está obligado a hablar que ligereza e indiscreción en hablar cuando se debe callar.

5. Es cierto que, en líneas generales, se arriesga menos callando que hablando.

6. El hombre nunca es más dueño de sí que en el silencio: cuando habla parece, por así decir, derramarse y disiparse por el discurso, de forma que pertenece menos a sí mismo que a los demás.

7. Cuando se tiene algo importante que decir, debe prestársele una atención particular: hay que decírsela a uno mismo, y, tras esta precaución, repetírsela, no vaya a ser que haya motivo para arrepentirse cuando uno ya no sea dueño de retener lo que declarado.

8. Si se trata de guardar un secreto, nunca calla uno bastante; el silencio es entonces una de esas cosas en las que de ordinario no hay exceso que temer.

9. La reserva necesaria para guardar bien silencio en la conducta ordinaria de la vida no es una virtud menor que la habilidad y el cuidado en hablar bien; y no hay más mérito en explicar lo que uno sabe que en callar bien sobre lo que se ignora. A veces el silencio del prudente vale más que el razonamiento del filósofo; el silencio del primero es una lección para los impertinentes y una corrección para los culpables.

10. A veces el silencio hace las veces de sabiduría en un hombre limitado, y de capacidad en un ignorante.

11. Por naturaleza nos inclinamos a creer que un hombre que habla muy poco no es un gran genio, y que otro que habla demasiado es un hombre aturdido o un loco. Más vale pasar por no ser un genio de primer orden, permaneciendo a menudo en silencio, que por un loco, dejándose arrastrar por el prurito de hablar demasiado.

12. Es propio de un hombre valiente hablar poco y realizar grandes hechos. Es de un hombre de sentido común hablar poco y decir siempre cosas razonables.

13. Por más inclinación que tengamos al silencio, siempre hay que desconfiar de uno mismo; y, si tuviésemos demasiado deseo de decir algo, a menudo eso mismo sería motivo suficiente para decidirse a no decirlo.

14. El silencio es necesario en muchas ocasiones, pero siempre hay que ser sincero; se pueden retener algunos pensamientos, pero no debe disfrazarse ninguno. Hay formas de callar sin cerrar el corazón; de ser discreto, sin ser sombrío y taciturno; de ocultar algunas verdades, sin cubrirlas de mentiras.


El ensayo, El arte de callar, fue escrito en París en el año 1771 por el abate Joseph Antoine Toussaint Dinouart.

miércoles, 7 de octubre de 2009

El Arte de Callar (parte I)

Cuando no tienes las palabras necesarias y oportunas.
Cuando temes perder al decir lo que no quieres.
Cuando quieres probar si aquella alma es capaz de leer la tuya.
Cuando no tienes valor para expresar lo más hermoso dentro de ti
Cuando no puedes decir “no”
Cuando sólo quieres alejarte sin dejar que alguien te comprenda…
Cuando quieres decir a esa persona que la necesitas, pero que sabes que nunca estará contigo.
Cuando no quieres dar libertad al “amor de las palabras”.

Muchas veces basta una mirada. Una mirada sostenida. Los ojos sobre los ojos del otro. Adivinar el significado de los brillos. Leer el futuro inmediato más allá de la pupila. Quieren decir muchas cosas, pero aguántate las ganas. Aprieta los labios. Permite que las ideas circulen pero que se queden adentro. Alarga el espacio entre las preguntas y las respuestas. Dejar que los músculos se dibujen en el rostro. Espera una señal de alerta. Forzar la respiración. Jugar con las manos, lentamente, cerca de la boca. Pensar que el otro piensa. Analiza. Espera. La economía de las palabras es una virtud que no es exclusiva de las monjas de clausura. Un juego que practican los que saben hacerse los locos. Los que entienden que no todos los interrogantes merecen una frase. Que la solución no siempre llega al abrir la boca. ¿Por qué decirlo todo?

¿Por qué no mantener en conserva una dosis de lo que se piensa? ¿Por qué no convertir en secreto algunas de las ideas que hacen su aparición sin previo aviso, al menos con la ilusión de que el tiempo las madure y las transforme en ideas más duraderas? ¿Por qué no entender, de una vez, que la boca jamás logrará ser tan rápida como el cerebro? Y que no todo lo que cruza por la mente puede convertirse en palabras, ni lo merece? ¿Que también se puede hablar con el gesto? ¿Que el silencio a veces grita?

Se guarda silencio en los hospitales, en las salas de velatorios, en las sesiones solemnes y en el consultorio odontológico. Se guarda silencio por pudor, por respeto, por dolor, por el dolor que es incapaz de convertirse en llanto. O cuando el llanto se agota, y agota al que llora. También se guarda silencio por temor, cuando resbala un plato del gabinete de la cocina, y los que escuchan el estruendo imaginan lo peor. Silencio después del estruendo. Después de la agonía, del orgasmo, del choque, del disparo. Habría que aprender a callar sin otro motivo que la propia voluntad. Callar para escuchar. Callar para mirar. Callar para aprender. Callar para callar. Callar, para convertir el silencio en un cómplice. Para saber si el eco existe.

Callar, porque no todo lo que nos conviene escuchar nos lo dicen al oído, con la intimidad de una confesión, con el volumen de un grito, con el acento de las grandes revelaciones. Callar, para comprender que el silencio es el antifaz de los sonidos más hermosos. Habría que aprender a callar y hacerse amigo del silencio para que no nos sorprenda en la tumba.

Fernando Quiroz.


Reproduciendo este escrito de Fernando Quiroz, no intento hacer una apología del silencio. Reconozco el inmenso valor de la palabra y lo importante de expresar y exteriorizar con ellas lo que uno piensa y siente. A través de ellas crecemos, evolucionamos y nos relacionamos con nuestros congéneres, como así también con cada nueva que incorporamos y lo que ella significa, agrandamos nuestro contexto. Sin embargo revalorizo el silencio como una forma más de expresarnos, tanto como una mirada, un gesto, una sonrisa, un apretón de manos o un abrazo. Por todo eso, cuando alguien se expresa a través de sus silencios, solo resta interpretarlo y por sobre todas las cosas, respetarlo.

lunes, 5 de octubre de 2009

Las etapas.

Siempre es preciso saber cuándo se acaba una etapa de la vida.

Si insistes en permanecer en ella, más allá del tiempo necesario, pierdes la alegría y el sentido del resto. Cerrando círculos, o cerrando puertas, o cerrando capítulos. Como quiera llamarlo, lo importante es poder cerrarlos, dejar ir momentos de la vida que se van clausurando.

¿Terminó con su trabajo?, ¿Se acabó la relación?, ¿Ya no vive más en esa casa?, ¿Debe irse de viaje?, ¿La amistad se acabó?

Puede pasarse mucho tiempo de su presente "revolcándose" en los porqués, en rebobinar el cassette y tratar de entender por qué sucedió tal o cual hecho.

El desgaste va a ser infinito porque en la vida, usted, yo, su amigo, sus hijos, sus hermanas, todos y todas estamos abocados a ir cerrando capítulos, a pasar la hoja, a terminar con etapas, o con momentos de la Vida y seguir adelante.

No podemos estar en el presente añorando el pasado. Ni siquiera preguntándonos por qué. Lo que sucedió, sucedió, y hay que soltar, hay que desprenderse.

No podemos ser niños eternos, ni adolescentes tardíos, ni empleados de empresas inexistentes, ni tener vínculos con quien no quiere estar vinculado a nosotros.

¡Los hechos pasan y hay que dejarlos ir! Por eso a veces es tan importante destruir recuerdos, regalar presentes, cambiar de casa, documentos por tirar, libros por vender o regalar. Los cambios externos pueden simbolizar procesos interiores de superación. Dejar ir, soltar, desprenderse. En la vida nadie juega con las cartas marcadas, y hay que aprender a perder y a ganar. Hay que dejar ir, hay que pasar la hoja, hay que vivir con sólo lo que tenemos en el presente!. El pasado ya pasó.

No esperen que le devuelvan, no espere que le reconozcan, no espere que alguna vez se den cuenta de quién es usted. Suelte el resentimiento, el prender "su televisor personal" para darle y darle al asunto, lo único que consigue es dañarlo mentalmente, envenenarlo, amargarlo.

La vida está para adelante, nunca para atrás. Porque si usted anda por la vida dejando "puertas abiertas", por si acaso, nunca podrá desprenderse ni vivir lo de hoy con satisfacción.

Noviazgos o amistades que no clausuran, posibilidades de "regresar" (a qué?), necesidad de aclaraciones, palabras que no se dijeron, silencios que lo invadieron. ¡Si puede enfrentarlos ya y ahora, hágalo!, si no, déjelo ir, cierre capítulos. Dígase a usted mismo que no, que no vuelve.

Pero no por orgullo ni soberbia, sino porque usted ya no encaja allí, en ese lugar, en ese corazón, en esa habitación, en esa casa, en ese escritorio, en ese oficio. Usted ya no es el mismo que se fue, hace dos días, hace tres meses, hace un año, por lo tanto, no hay nada a que volver. Cierre la puerta, pase la hoja, cierre el círculo. Ni usted será el mismo, ni el entorno al que regresa será igual, porque en la vida nada se queda quieto, nada es estático.

Es salud mental, amor por usted mismo desprender lo que ya no está en su vida. Recuerde que nada ni nadie es indispensable. Ni una persona, ni un lugar, ni un trabajo, nada es vital para vivir porque: cuando usted vino a este mundo “llegó” sin ese adhesivo, por lo tanto es "costumbre" vivir pegado a él, y es un trabajo personal aprender a vivir sin él, sin el adhesivo humano o físico que hoy le duele dejar ir. Es un proceso de aprender a desprenderse y, humanamente se puede lograr porque, le repito, ¡nada ni nadie nos es indispensable! Sólo es costumbre, apego, necesidad.

Pero ... cierre, clausure, limpie, tire, oxigene, despréndase, sacuda, suelte. Hay tantas palabras para significar salud mental y cualquiera que sea la que escoja, le ayudará definitivamente a seguir para adelante con tranquilidad.

¡Esa es la vida!

Paulo Coelho


Entender que el pasado pasó, aprender de los errores sin quedarse atado a ellos y vivir el presente con perspectiva de futuro es vital, aunque se sufra y duela... Si, claro, pero no es tan fácil... Sí de algún modo lo es. Todo en la vida es acerca de elecciones. Cuando quitas todo lo demás, cada situación es una elección. Tú eliges cómo reaccionas ante cada situación, tú eliges cómo la gente afectará tu estado de ánimo, tú eliges estar de buen humor o mal humor. En resumen, TU ELIGES COMO VIVIR LA VIDA.

viernes, 2 de octubre de 2009

Sawabona - Sobre estar solo.

No es solamente el avance tecnológico lo que marcó el inicio de este milenio, las relaciones afectivas también están pasando por profundas transformaciones y revolucionando el concepto de Amor.

Lo que se busca hoy es una relación compatible con los tiempos modernos, en la cual exista individualidad, respeto, alegría y placer de estar juntos; y no una relación de dependencia en la cual uno responsabiliza al otro por su bienestar.

La idea de una persona que es el remedio para nuestra felicidad, que nació con el romanticismo seguramente desaparecerá en este principio de siglo. El Amor Romántico parte de la premisa de que somos una fracción y necesitamos encontrar nuestra otra mitad para sentirnos completos.

Muchas veces se produce un proceso de despersonalización que, históricamente, es protagonizado por la mujer. Ella abandona sus características para amalgamarse al proyecto masculino

La teoría de atracción entre opuestos, también viene de la misma raíz: tiene que saber hacer lo que yo no sé, si soy manso él debe ser agresivo, y así todo lo demás. Una idea práctica de supervivencia y poco romántica

La palabra de orden de este siglo es asociación. Estamos cambiando el Amor de la necesidad, por el Amor del deseo. El gusto y el deseo por la compañía, y no por la necesidad, que es muy diferente.

Como el avance tecnológico, que exige más tiempo individual, las personas están perdiendo el miedo de quedarse solas, y aprendiendo a convivir mejor consigo mismas. Ellas están comenzando a percibir que se sienten fracción, pero son enteras.

El otro, también se siente una fracción. No es príncipe ni salvador de nada, es apenas un compañero de viaje.

El hombre es un animal que va cambiando al mundo, y después tiene que irse reciclando, para adaptarse al mundo que fabricó.

Estamos entrando en una era de individualismo, que no tiene nada que ver con egoísmo. El egoísta no tiene energía propia, él se alimenta de la energía que viene de otro, sea financiera o moral.

La nueva forma de Amor tiene nuevo significado: es el complemento de 2 enteros, y no la unión de 2 mitades. Y esto solo es posible para aquellos que consiguieran trabajar su individualidad.

Cuanto más competente es el individuo para vivir solo, más preparado estará para una relación afectiva.

La soledad es buena, estar solo no es vergonzoso, al contrario, da dignidad a la persona.

Las buenas relaciones afectivas son óptimas, son muy parecidas a estar solo, nadie exige nada de nadie y ambos crecen.

Relaciones de dominación o de concesiones exageradas son cosas del siglo pasado.

Cada cerebro es único. Nuestro modo de pensar y de hacer no sirve de referencia para nadie.

Muchas veces pensamos que otro es nuestra alma gemela y, en verdad, lo que hicimos fue inventárnoslo a nuestro modo.

Todos deberíamos quedarnos solos de vez en cuando, para establecer un diálogo interno y descubrir nuestra fuerza personal.

En soledad, el individuo entiende que la armonía y la paz de espíritu solo pueden encontrarse dentro de él mismo, y no a partir de otro.

Al percibir eso, él se torna menos crítico y más comprensivo con las diferencias, respetando la manera de ser de cada uno.

El Amor de 2 personas enteras es mucho más saludable.
En este tipo de relación se da el placer de la compañía y el respeto por el ser amado.

No siempre es suficiente ser perdonado por alguien, algunas veces necesitas aprender a perdonarte a ti mismo.

*"SAWABONA", es un saludo usado en el sur de África y quiere decir: “YO TE RESPETO, TE VALORO, Y ERES IMPORTANTE PARA MÍ”. Como respuesta las personas dicen: "SHIKOBA", que es “ENTONCES, YO EXISTO PARA TI”

Flavio Gikovate (médico y psicoterapeuta)